Memoria
Del mismo modo que una soga o un cabo se puede deshilachar en cuerdas, cordones y fibras, la estructura de recorridos de un parque lo puede hacer en paseos, caminos y sendas.
Paseos, caminos y sendas que como cabos, hebras y cuerdas se enredan y desenredan se lían y cruzan, ofreciendo recorridos alternativos, en una madeja compleja de itinerarios que conforma la estructura y el núcleo central del parque.
Del itinerario principal se deshebran los distintos paseos, caminos o sendas que se extienden sobre el parque, unas veces alterando su topografía natural y otras, adaptándose a ella.
Los itinerarios, normalmente sin excesiva pendiente, cuando no se adaptan escrupulosamente al terreno, forman desmontes y terraplenes, incluso pasarelas puente, acusando una cierta artificialidad que convierte los recorridos en “itinerarios sorpresa”.
Una de las hebras de la madeja la constituye el arroyo que serpentea la ladera entre los caminos, formando pequeños meandros o estancamientos de agua, desde su manantial de origen hasta el lago al que vierte en cascada a través de un acueducto.