Memoria
El nuevo mercado-norte ocupa la misma superficie de suelo que el edificio actual al que pretende sustituir, y como él mantiene un soportal en su fachada a la Plaza de España.
Se trata de un edificio comercial en el que la actividad del mercado es la principal protagonista. Un supermercado en primer sótano y una o dos medianas superficies, en primera planta, y una planta superior de oficinas completan el programa funcional del edificio.
El edificio se estructura en torno a un espacio longitudinal, paralelo al soportal de la fachada a la Plaza de España, que se comporta como una calle interior de doble altura en la que se sitúan todos los elementos de comunicación vertical, ascensores y escaleras mecánicas, para así, transmitir al exterior toda la actividad de lo que ocurre en el interior.
El edificio quiere ser como un monitor puesto en la calle, frente a la Plaza de España, que muestra y expone su actividad como reclamo comercial, invitando a entrar en él y recorrer sus distintas plantas comerciales.
Desde la calle no solo se pueden ver las pequeñas tiendas exteriores e interiores, y el mercado con sus coloridos puestos, sino que también, hacia abajo a través de una larga apertura en el suelo, junto a las escaleras mecánicas, el supermercado y hacia arriba la cafetería escaparate y la planta de la mediana superficie.
El edificio de convierte así en escaparate de sí mismo y su vitalidad interior en su principal reclamo.
El edificio estará dotado de sistemas pasivos y activos para lograr la máxima eficiencia energética.