Memoria
La composición del edificio responde a un concepto de axialidad equilibrada, que valora la movilidad y la flexibilidad buscando una intensa relación entre interior – exterior mediante grandes ventanales que permiten la entrada de luz y el disfrute de las vistas del exterior.
El eje longitudinal se ha proyectado paralelo al viario exterior, buscando un mayor rendimiento de la planta, así como para potenciar la fachada principal y su presencia desde el exterior. Mediante este sistema organizativo se consiguen efectos muy deseables, como la iluminación natural de los espacios de trabajo, la posibilidad de independencia de determinadas zonas, facilitar la orientación interior de las personas y su comunicación y buscar una mayor riqueza visual del exterior de las zonas de oficina. Se consigue una fácil sectorización que facilita la adaptación del edificio a las normativas aplicables y mayor seguridad y comodidad de los usuarios en caso de evacuación.
El cerramiento exterior es una doble piel que pretende conseguir el óptimo control ambiental y lumínico, buscando lograr las mejores condiciones en el interior, y ayudar a disminuir el consumo energético. El edificio dispone en todo su perímetro acristalado una cornisa corrida, o pasarela de limpieza y mantenimiento que actúa como visera de protección solar de las áreas de trabajo y sirve de apoyo al cerramiento de chapa plegada perforada que da una imagen homogénea del conjunto y no limita la visión hacia el exterior.